Most common methods for disinfecting swimming pool water
El agua es el elemento principal de la piscina y es necesario cuidarla porque, a pesar de que tenga un aspecto cristalino, siempre está sujeta a formas de contaminación que no son evidentes a simple vista.
Bacterias, microorganismos y cuerpos extraños se introducen a diario en la piscina porque en muchos casos la instalación está al aire libre o simplemente debido a los residuos orgánicos que desprenden los cuerpos de los bañistas.
Pero no hay problema, con los productos y técnicas adecuadas el agua no presentará ningún tipo de riesgo y los baños serán siempre seguros. La desinfección del agua de la piscina es esencial para garantizar un ambiente seguro y saludable para los bañistas. Existen varios métodos comunes de desinfección, cada uno con sus propias ventajas e inconvenientes. A continuación, exploraremos algunos de los más utilizados:
Most common methods for disinfecting swimming pool water
Chlorine
Es sin duda el producto más utilizado, sobre todo en las piscinas públicas. Es fácil de usar y tiene un bajo coste, aunque poco a poco otros sistemas empiezan a imponerse.
Se dosifica en el agua en diversas formas: líquido, en pastillas (más comúnmente conocidas como «tabletas») y granulado.
Tiene como desventaja la posibilidad de producir derivados no deseados del cloro, como las cloraminas, que producen el típico “olor a cloro” e irritan la piel y los ojos.
Requiere, además, que la persona que lo aplica tenga un mínimo de conocimientos, pues es necesario ajustar bien el pH del agua y la dosis de cloro para unos niveles adecuados de cloro libre en el agua.
Cloración salina
Se conoce también como electrólisis salina. Entre los sistemas de desinfección automática, es sin duda el más extendido. Funciona en ausencia de productos químicos porque autoproduce cloro (en forma de hipoclorito sódico) con la única ayuda de la sal disuelta en el agua a baja concentración y la electricidad.
Al fin y al cabo, «electrólisis» es un término que procede del griego y significa «romper con electricidad».
Con pocas contraindicaciones, también se utiliza ampliamente en spas con excelentes resultados y, con el tiempo, se ha convertido en la mejor alternativa al cloro.
A pesar de sus beneficios, la instalación inicial puede ser costosa y requiere un mantenimiento regular.
Bromo
El bromo es una alternativa al cloro y es especialmente útil en aguas con temperaturas elevadas, como las de los spas, ya que mantiene su eficacia en aguas hasta 40 ºC.
Es menos irritante para la piel y los ojos y el agua no tiene el típico “olor a cloro” (que, en realidad, se debe a las cloraminas que se generan como subproducto), pero su coste es sensiblemente más alto.
Además, su capacidad de actuación contra algas es más fuerte que la del cloro. Por otro lado, el bromo es menos corrosivo y, además, su efectividad depende menos del pH: a diferencia del cloro, el bromo mantiene su eficacia incluso en aguas con pH elevado.
Oxígeno activo
Es incoloro, inodoro e inocuo, no irrita la piel ni los ojos.
Este método actúa liberando oxígeno en el agua que, al entrar en contacto con los microorganismos, los destruye sin dejar residuos.
Sus desventajas son el alto coste y una baja resistencia a las altas temperaturas.
Su presentación habitual suele ser la granulada.
Ozone
Se trata de un tratamiento complejo y de coste elevado, pero con resultados garantizados: produce un agua bien desinfectada y de una excelente calidad.
El ozono se produce mediante un accesorio llamado ozonizador que regula su producción y uso.
Gracias al fuerte poder oxidante del gas, actúa directa y eficazmente sobre algas y bacterias.
El ozono no produce olores ni irritación de ojos o piel.
Rayos UV
Otro de los sistemas más utilizado como alternativa al cloro porque no requiere el uso de productos químicos.
La desinfección del agua se realiza mediante lámparas de luz ultravioleta colocadas en la tubería de recirculación del agua. Esta energía tiene un poder disruptivo sobre bacterias, virus y algas ya que tiene la capacidad de atacarlas directamente en su ADN, eliminándolas de forma permanente. De esta manera se asegura una desinfección total sin dejar residuos químicos, pues la luz ultravioleta es muy efectiva incluso contra los microorganismos resistentes a la acción del cloro.
Por otro lado, el tratamiento con luz ultravioleta es especialmente valioso en situaciones donde el cloro tiene limitaciones, como el agua a elevadas temperaturas.
Existen diferentes modelos de sistemas UV en el mercado, cuya potencia varía en función del tamaño de la piscina.
Conclusión
En conclusión, la elección del método de desinfección para una piscina depende de varios factores, incluyendo el costo, la facilidad de uso y mantenimiento, y las preferencias personales en cuanto a la exposición a químicos. Es importante considerar tanto las ventajas como los inconvenientes de cada método para tomar una decisión informada que garantice la seguridad y el confort de los usuarios de la piscina.
Sea cual sea la solución que elija, confíe en la experiencia de ProDos.
Most common methods for disinfecting swimming pool water